Entonces, ¿quién eres y qué te llevó a estudiar eslovaco?
¿Y en qué lengua os comunicáis en vuestro día a día?
Normalmente estamos acostumbrados a hablar en inglés, pero ahora que él sabe español, también usamos el español, y a veces intentamos el eslovaco.
¿A qué te refieres con intentar?
¿Por qué no te apoyas únicamente en el inglés?
Y ahora la gran pregunta, ¿cómo aprendiste o estás aprendiendo el idioma? ¿Podrías detallarnos tu proceso de aprendizaje?
Empecé con un profesor privado – o sea, contigo (wink wink) – y luego compré el libro Krížom Krážom. Empecé con vocabulario y conjugación de verbos en presente. Y a partir de ahí ya hubo más actividades de lectura, de escucha y poco a poco fui ganando más confianza con el idioma. Hasta que pude ver algunos vídeos cortos, y después pasé a las películas, series y podcasts. Pero eso sí, siempre con el Krížom Krážom, para apoyar el aprendizaje.
Me gusta tener la oportunidad de hablar contigo regularmente, porque siento que el aprendizaje de esta manera se enfoca más en poder comunicarme, y no en aprender listas y cosas que luego quizás no sé usar.
Dado lo limitados que son los recursos para aprender eslovaco, Krížom Krážom es un clásico. ¿Qué te parece el libro?
Puedes contarnos más ¿cómo fueron tus inicios en el aprendizaje? ¿Qué te pareció la lengua? ¿Se puso más difícil ahora o se volvió más fácil después de tanto tiempo estudiando?
Al principio era difícil, sobre todo en mi caso por la pronunciación y la escritura porque hay letras o sonidos totalmente diferentes al español. Era complicado retenerlo en mi cabeza. Y después no creo que se volviera más difícil o más fácil, sino que cambian los retos que tengo que superar para seguir avanzando. Entonces ahora la pronunciación no me parece tan difícil, y tampoco la forma de escribir, pero hay otros aspectos de la lengua que sí están siendo un reto.
¿De qué aspectos estamos hablando?
Me refiero a las preposiciones y declinaciones.
¿Incluso el aspecto verbal – vid – no te parece más difícil que eso?
Hace tres años empezaste desde cero. Cuéntanos un poco más sobre tu nivel actual. ¿Estás contenta con él después del tiempo que le dedicaste?
Estoy con el nivel B1 ahora mismo y creo que está bien para el objetivo que tengo, dado que tenemos una hora cada semana. Claro, si quieres aprender eslovaco, por ejemplo, para mudarte allí, necesitarías más tiempo. Pero como estoy viviendo en España, ese no es mi caso así que estoy tranquila.
Como tu profe orgulloso que soy, voy a tomar el crédito y presumir que aprobaste el examen B1. ¿Te sorprendió el resultado o esperabas incluso algo mejor?
La primera vez, cuando vi el examen, dije, uff, qué difícil, no voy a aprobar. Pero después, poco a poco lo fui haciendo, y claro que hubo algunos ejercicios más difíciles que otros. Pero creo que uno no es consciente tampoco del nivel de lengua que tiene hasta que lo tiene que demostrar.
¿Cómo te llevas ahora con el eslovaco? ¿Dirías que es una relación amor-odio o todo es color de rosas?
Creo que bien, me gusta. Durante la semana me gusta hacer los deberes, aunque suene raro. Lo que sí noto, como tengo menos tiempo, quizás desaceleré un poco el aprendizaje, pero estoy contenta. No lo veo como amor-odio, quizás por las declinaciones que noto que me cuestan, pero me gusta estar estudiando el eslovaco. Ahora que lo entiendo más, me gusta la forma de hablarlo, aunque la pronunciación a veces sigue siendo un poco difícil. Pero no es tan difícil como en otros idiomas, y la forma de construir frases también me parece bien.
¿Cómo es el eslovaco si lo comparas con otros idiomas que estudiaste?
¿Qué dirías si compararas el eslovaco con tu lengua materna? Yo por ejemplo tengo la sensación que muchas veces nos ponemos mucho más específicos con los verbos, comparado con el español.
Ya visitaste Eslovaquia unas cuantas veces. ¿Hubo algo que te sorprendió? ¿Te sentiste preparada desde el punto de vista lingüístico la primera y las siguientes veces?
Recuerdo que la primera vez que lo visité sí que sentía como que estaba en otro mundo, porque no entendía nada. No era capaz de distinguir dónde empezaba una palabra y terminaba cuando hablaban. Yo solo oía sonidos, pero no sabía bien qué palabras formaban, si decían dos palabras o estaban diciendo diez en realidad. Además, era diciembre y el tiempo era muy diferente, bastante a lo que yo estaba acostumbrada. Pero eso a lo mejor son cosas más culturales. No quiero decir que los eslovacos son fríos, pero al principio me parecía que eran más serios, serios para hablar… sin sonreír o sin utilizar mucho las manos, o gestos y demás. Ahora que ya entiendo que la gente quizás es menos expresiva, no siento que sea mejor ni peor, simplemente diferente.
Hablando de las diferencias culturales, todos conocemos los estereotipos de la gente del Mediterráneo rejalada y los fríos europeos del Este. Después de años en contacto con la gente y el país, ¿puedes decir que son ciertos o has comprobado que estaban equivocados?
Sé lo que dicen de los países del este o del norte de Europa, pero no creo que seáis tan fríos. La gente de Eslovaquia siempre ha sido hospitalaria y amable conmigo. Lo que también me sorprendió de manera positiva fue la comida – no es que yo sea tiquismiquis, pero me gusta bastante. ¡Vianočka con Granko es lo más!
Ya pasaste una considerable parte de tu vida viviendo con un eslovaco. ¿Hay algo que te gustaría cambiar de nuestra gente?
Algo que me gustaría cambiar es que los eslovacos no se quejen tanto. Creo que se valora poco, en general todo es malo, todo es como pesimista, y yo no lo veo así. Claro, quizás en general el país tiene problemas, o tal vez hay muchos eslovacos que lo pasan mal por situaciones personales, pero sí que son a veces demasiado pesimistas, de quejarse, de envidiar. Yo desde fuera escucho eso, las quejas, pero luego cuando estás en Eslovaquia creo que tiene muchas cosas buenas. El pueblo de donde es mi marido es muy tranquilo y el país en general me parece bonito, lo que pude ver.
Si volvemos a tu aprendizaje de eslovaco: ¿Qué te ayudó o te ayuda más hasta ahora?
Definitivamente el escuchar. Las grabaciones del libro claro que te ayudan al principio, pero un paso grande para mí fue cuando empezamos a ver Peppa Pig en eslovaco. La lengua del manual al final está filtrada, entonces viendo los vídeos me ayudó a tener una conciencia más real del uso de la lengua cotidiana.
Sinceramente, a ninguno de mis estudiantes le encantó ver Peppa Pig y a ti tampoco te vi tan emocionada. Cuéntanos, ¿cuál es realmente tu contenido de aprendizaje en eslovaco favorito?
En cuanto a los vídeos, el paso de Krížom Krážom a Peppa Pig a mí sí que me gustó, porque ya no es un material preparado para extranjeros, sino que es un material de eslovacos, aunque sean niños. Cuando después pasamos a películas y series, eso sí que motivó, porque aunque no entiendas todo 100%, puedes seguir una película igual que un hablante nativo. Gracias a ti vi algunas películas de Disney que nunca había visto en español, por ejemplo Ralph el Demoledor me gustó mucho. Recuerdo que una vez me recomendaste una canción de Majk Spirit, la cantaba toda la semana. Así que me parece genial intentar y descubrir también la cultura o cosas relacionadas con el país, porque así también se aprende el idioma.
Ahora me gusta mucho escuchar los podcasts, aunque son difíciles. Cuando voy de vacaciones a Eslovaquia en verano, estamos en el jardín y escuchamos Rádio Express, lo cual es muy parecido a la emisora que escuchamos ahora. Entonces supongo que la próxima vez que vaya a Eslovaquia estaré más atenta a lo que digan en Rádio Express.
¿Tienes algunos futuros objetivos en cuanto al idioma o al país? ¿Algo que te gustaría probar, conseguir o visitar?
Bueno, mejorar en general y aprender la lengua mejor para poder comunicarme con más facilidad. Ahora sí que me puedo comunicar, pero hay veces que me quedo estancada y no puedo hablar tanto. La verdad es que no tengo ninguna lista de viaje, a lo mejor me gustaría conocer un poco más el oeste de Eslovaquia, porque hasta ahora me he movido más por el este de donde es mi marido.
Última pregunta, ¿qué le recomendarías a alguien que quiera aprender eslovaco?
Paciencia, sobre todo al principio. Depende de cuál es tu lengua materna, pero por ejemplo para un español sí que lo veo como un poco de shock, si no estás acostumbrado a escuchar, a leer o a ver cosas en eslovaco. Supongo que será diferente para un español que vive en Eslovaquia que para un español como yo, que estoy en España, pero aprendo el idioma. Entonces paciencia al principio, porque todo parece muy raro, pero después todo toma sentido.